Las habilidades blandas o soft skills juegan un rol cada vez más determinante en el desarrollo de los trabajadores. El bienestar laboral, y la importancia de la gestión emocional en el trabajo, han pasado a tener un papel mucho más determinante en el ámbito profesional.
Pero… ¿Qué son las soft skills? En nuestro artículo de hoy, explicamos el impacto de este tipo de habilidades en los lugares de trabajo, y cuáles son las más requeridas para los desarrolladores IT.
¿Qué son las soft skills?
Las soft skills son aquellas habilidades personales de las que precisa todo trabajador para ejercer un buen desempeño laboral. Las cuales, en definitiva, se rigen por aquellos elementos que, aunque subjetivos, ayudan a construir un entorno laboral más eficiente y colaborativo.
En el mundo profesional hay una clara tendencia a crear espacios profesionales seguros, y que faciliten las relaciones laborales. Las dinámicas en el trabajo tienen un rol muy importante, a la hora de atraer y retener talento. El trabajo en las soft skills se ha acentuado con la voluntad de crear entornos más productivos, y unos climas laborales que resulten más agradables para los profesionales.
En esta ocasión hablamos de las 10 soft skills que más requieren los desarrolladores IT. Un perfil profesional, que, aunque pueda destacar por sus capacidades técnicas, precisa de habilidades blandas con las que pueda ejercer su trabajo de manera más sencilla, y facilitar la colaboración con sus equipos.
¿Qué es un desarrollador IT?
El cargo de un desarrollador IT está muy relacionado con los términos digitales. Siendo su principal labor los lenguajes de programación… Las tareas que ocupan a un desarrollador IT son muy diversas: desde el diseño de interfaz, el uso de JavaScript y Python, el mantenimiento y mejora de sistemas, y un largo etcétera.
No obstante, aunque todas las habilidades que puedan estar relacionadas a esta ocupación puedan parecer aspectos técnicos. Las habilidades blandas juegan un rol mucho más definitivo en la evolución de este perfil. A continuación, hablamos de las 10 soft skills que prometen mejorar el trabajo en el sector IT.
10 habilidades para los desarrolladores IT
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Organización
El trabajo de un desarrollador IT consta de numerosas fases, y multitud de proyectos simultáneos. Grandes cantidades de gestión de data forman parte de la gran mayoría de ocupaciones de los desarrolladores IT. De acuerdo con esto, la necesidad de habilidades organizativas impera en este tipo de trabajos. Y, no únicamente en la organización de las tareas, sino también en una buena gestión del tiempo que permita comprender las necesidades de cada proyecto, y las posibles complicaciones que pueda tener.
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Trabajo en equipo
El trabajo en equipo es un elemento fundamental para la coordinación de proyectos, y el reparto de funciones. Saber cómo hacer un buen trabajo en equipo facilitará la coordinación de los trabajadores, y permitirá avanzar las tareas a unos ritmos mucho más ágiles.
Además, la combinación de las aptitudes de todo un equipo permite mejorar su resultado final, gracias a la combinación de distintos perfiles, diferentes puntos de vista y maneras de actuar.
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Adaptabilidad
Como hemos mencionado, el trabajo por proyectos es habitual en la ocupación de un desarrollador IT. Por lo tanto, será necesario que las personas que ocupen este rol no sean escépticas a la hora de integrar nuevas metodologías, y mantengan una mente abierta, que les permita aprender de los distintos funcionamientos, y extraer insights significativos.
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Comunicación
Las habilidades comunicativas tienen una gran importancia en el sector IT. Ya que, al tratar con muchos aspectos técnicos, se precisa de una buena comunicación para que, desde otros departamentos, puedan entender los cambios realizados, o la adopción de nuevas técnicas.
En resumen, la claridad comunicativa facilitará el trabajo común, y se valorará a la hora de formar equipos más cohesionados, y con una fotografía más clara del estado de su producto o servicio.
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Aprender a aprender
La vanguardia es algo que está siempre al orden del día, en lo que a tecnologías digitales se refiere. Dicho esto, la exigencia de perfiles inquietos y con ganas de seguir aprendiendo son fundamentales en los rasgos que componen a un desarrollador IT.
Nuevos programas, aplicaciones, y un infinito de términos tecnológicos van evolucionando año tras año. Los conocimientos digitales están en constante evolución, por lo tanto, trabajar en su desarrollo va a ser un elemento clave.
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Creatividad
La facilidad e innovación de actuar delante de un problema también es una manera de demostrar las habilidades creativas y/o resolutivas, por lo que, perfiles que tengan grandes habilidades de reacción delante de los problemas que se presenten, también serán valorados y deseados.
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Feedback
La necesidad de dar y recibir feedback también ocupa un lugar central en las aptitudes de cualquier desarrollador IT. A la hora de diseñar cualquier interfaz, o programador, es fundamental ver la respuesta de la gente, y si les resulta de fácil uso.
Gracias al feedback es como conseguimos mejorar nuestros proyectos, y hacer un mejor desarrollo de nuestras herramientas digitales.
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Empatía
Es muy importante apostar por entornos laborales sanos y en los que se respeten a los compañeros, y, aunque la empatía pueda resultar un atributo genérico, también es altamente valorado en este tipo de perfil profesional.
La capacidad de transmitir los distintos puntos de vista, teniendo en cuenta los sentimientos de los compañeros, o clientes, es alentador para las compañías, y potenciador para el trabajo de los compañeros.
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Gestión del estrés
El trabajo simultáneo, en ocasiones, requiere de un fuerte temperamento para poder lidiar con todas las ocupaciones que se deben realizar. Por lo que la gestión del estrés también es un elemento del que precisan la mayoría de los desarrolladores IT.
A través, de una buena gestión del estrés se consigue reconducir la mayoría de las situaciones, y que no cunda el pánico en situaciones de sobrecarga de trabajo.
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Autoliderazgo
Por último, pero no menos importante, el autoliderazgo. Este cargo requiere de una fuerte diligencia y capacidad de sobrellevar situaciones inesperadas. Por lo que, el autoliderazgo va a tener un rol esencial en la manera de poder hacer frente a nuevos retos, sin tener que ir pidiendo constantemente validación y ayuda de personas externas.