El Cloud – piedra angular de la transformación digital

La tecnología ha avanzado a pasos de gigante en esta última década y más con la aparición de la pandemia del COVID. Esta última casuística ha provocado que las empresas se hayan percatado de su retraso en el avance tecnológico y en la manera de trabajar, dando paso al inicio de la transformación digital.

¿Qué es la transformación digital?

Podemos decir que es la integración de tecnología digital en todas las áreas de una empresa, cambiando esencialmente la forma en que opera y brinda valor a sus clientes. También supone un cambio cultural que requiere que las empresas desafíen constantemente su actual estatus, experimenten y se sientan abiertas al cambio.
La transformación digital también implica la reelaboración de los productos, procesos y estrategias dentro de la organización mediante el aprovechamiento de la tecnología digital.
Como tal, la transformación digital requiere un examen y reinvención de la mayoría, si no de todas las áreas dentro de una organización, de su cadena de suministro y flujo de trabajo, las habilidades de sus empleados, así como procesos de discusión a nivel de junta directiva, interacciones con clientes y su valor para las partes interesadas.
La transformación digital ayuda a una organización a seguir el ritmo vertiginoso a las demandas emergentes de los clientes, manteniéndolas en el futuro. Asimismo permite que las empresas compitan mejor en un entorno económico que cambia constantemente a medida que la tecnología evoluciona. Con este objetivo final, la transformación digital es necesaria para cualquier empresa, organización sin fines de lucro o institución que busque sobrevivir en el futuro.

El trabajo en Cloud: un avance para la empresa

Trabajar en Cloud se caracteriza por permitir la gestión de los datos desde cualquier lugar, además de almacenarla y crear copias de seguridad de una manera mucho más sencilla. Básicamente, el entorno cloud ha permitido a las empresas reducir costes en inversión mientras adoptan un modelo de pago por uso que permite una mayor escalabilidad.

El único pago que se realiza es para poder utilizar el programa, o los sistemas virtualizados, no siendo necesaria ninguna inversión en infraestructura. La instalación en la nube permite una mayor escalabilidad y flexibilidad a las empresas.
Generalmente los costes son reducidos porque se realizan pagos por SaaS (Software as a Service) y por lo tanto solo se paga por lo que se usa, pudiendo prescindir o aumentar los servicios contratados.

La nube, en este caso, es un sistema mucho más adaptado para facilitar el teletrabajo en remoto. Además de saltarle la obligación de estar en la oficina, poder acceder desde cualquier dispositivo a nuestro alcance supone romper una barrera más. El único requisito obligatorio es disponer de una conexión a Internet.
El Cloud Computing (Computación en la Nube) es un servicio de tecnología y negocios que permite que el usuario pueda acceder a una amplia variedad de funcionalidades, software y aplicaciones para gestionar sus datos o los de su empresa de forma más eficiente, almacenando su información en servidores remotos en vez de hacerlo en un equipo local.
Esto se realiza a través de una red, que usualmente es internet.

Ventajas de trabajar en Cloud

Son muchas las ventajas que obtiene las empresas y negocios con el cloud computing o el trabajo en el Cloud. Cabe destacar previamente que hay tres formas diferentes de implementar los servicios en la nube: nube pública, nube privada o nube híbrida y una cuarta menos extendida, pero con proyección el Multicloud. El método de implementación depende de las necesidades de su empresa.

En función del tipo de implementación del Cloud que utilicemos podemos tener diversas ventajas:

• Costes inferiores: no es necesario adquirir hardware ni software, y solo paga por el servicio que usa.
• Sin mantenimiento: su proveedor de servicios se encarga de ello.
• Escalabilidad casi ilimitada: en el caso de las nubes publicas hay disponibles recursos a petición para satisfacer las necesidades empresariales.
• Más escalabilidad: las nubes privadas suelen ofrecer más escalabilidad en comparación con la infraestructura del entorno local pero menor que la nube publica.
• Gran confiabilidad: una amplia red de servidores garantiza que no surjan problemas.
• Más flexibilidad: su organización puede personalizar el entorno en la nube para satisfacer necesidades empresariales específicas.
• Más control: los recursos no se comparten con nadie más, por tanto, es posible un mayor nivel de control y privacidad.
• Rentabilidad: gracias a la posibilidad de escalar su entorno en la nube pública solo pagará por la capacidad informática adicional cuando la necesite.
• Facilidad: la transición a la nube no tiene por qué ser compleja, ya que puede realizar una migración gradual, trasladando las cargas de trabajo por fases.

Estas ventajas se adaptan más a los tiempos en los que nos encontramos. El uso de la nube, de los múltiples servicios que nos ofrece, está muy presente ahora que el teletrabajo se ha convertido en el día a día de muchas empresas y sus trabajadores.

Beneficios para las empresas

A parte de las ventajas que tiene el trabajo en Cloud para las empresas, también existen otros beneficios, algunos de ellos no tangibles en materia de economía pero si en desarrollo de negocio y trabajo. Algunos de los beneficios que se pueden obtener con el trabajo en Cloud son:

• Adaptación a los cambios del mercado: Hoy en día los mercados sufren cambios constantemente, cambio de productos, de formas, de precios, de visibilidad, de conceptos incluso, tener la empresa trabajando en Cloud facilita la adaptación a estos cambios.
• Mejora la experiencia del cliente tanto externo como interno: El cliente externo valora la facilidad y rapidez de encontrar la información de lo que busca en una empresa. Este quiere tener una experiencia satisfactoria, ya sea en la compra de producto como en la información que pueda ofrecer la empresa. Así mismo la comunicación se hace más directa y personalizada, por ejemplo en el caso de presentaciones de productos, empresas, ofertas, etc. Respecto al cliente interno este tendrá una mejor experiencia en sus tareas diarias, facilidad y flexibilidad
• Aumento de la productividad: Una empresa que trabaja en Cloud puede aumentar hasta un 39% su productividad, cifra que hoy en día es más que un sueño para muchos empresarios debido a la satisfacción y eficiencia de los trabajadores, que han incorporado herramientas colaborativas digitales en su tareas diarias al estar estos mucho más “cómodos” y tener una flexibilidad que les permite tomar decisiones y llevarlas a cabo de una manera más rápida. La agilización en los procesos laborales es sin lugar a dudas una pieza clave en la productividad: detectar posibles problemas, encontrar las soluciones y llevarlas a cabo, provocan un aumento en el volumen de negocio y, por lo tanto, un incremento en los ingresos.
• Aumento del volumen de negocio: Llegar a los clientes hará que se mejore la reputación online y esta a su vez atraerán a los profesionales del sector con más talento hacia la empresa. El trabajo en Cloud, provocará la mejora de la experiencia que ofrece la empresa a los usuarios y como resultado hará que lleguen cada vez a más clientes potenciales. Según un informe de Deloitte: «Las pymes que utilizan ampliamente las tecnologías en la nube tienen una tasa de crecimiento más alta (en promedio + 26%) y una tasa de rentabilidad (+ 21%) que las pymes que no lo hacen”.

En resumen, trabajar en El Cloud significa para la empresa la piedra angular que sostiene los cambios tecnológicos, cambios que garantizan la resiliencia y la subsistencia de la organización. Los servicios gestionados en la nube, ayudarán a afianzar un nuevo modelo de trabajo, más eficaz, seguro y ágil.

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